El “vuelva usted mañana” de Mariano José de Larra sigue siendo aplicable para muchos ciudadanos españoles dos siglos después, aunque ahora se haya trasladado al entorno digital. Mientras que el problema al que se refirió en el siglo XIX el escritor y periodista fue la telaraña burocrática en la que uno podía verse envuelto, si viviera hoy, la gincana la encontraría en la pantalla de su ordenador, donde se enfrentaría a dificultades como lograr acceder a un trámite a través de la identificación electrónica, encontrar un número telefónico en el que ser atendido o comprender el propio texto.